Sólo tiene 300.000 años de antigüedad, una edad que lo convierte en el sistema planetario más joven de los que se han observado y medido hasta ahora. Un equipo de científicos del observatorio estadounidense National Radio ha localizado un sistema solar recién nacido y por tanto, en plena formación, en la constelación de Taurus.
Este sistema planetario, cuyas características se publican esta semana en la revista 'Nature', está situado a una distancia de la Tierra de 450 años-luz.
El corazón de este sistema es una estrella de tipo solar en proceso de formación (protoestrella), bautizada como L1527 IRS y
rodeada por un disco de polvo y gas. En la actualidad la protoestrella tiene una masa equivalente a una quinta parte de la de nuestro Sol, aunque los autores de este estudio señalan que está en pleno crecimiento y que probablemente acabará teniendo una masa parecida a la de nuestra estrella al atraer materia de su entorno. En comparación con la edad de nuestro Sistema Solar, que los astrónomos establecen en 4.600 millones de años, el nuevo sistema es casi un recién nacido, pues calculan que no tiene más de 300.000 años: "Podría ser incluso más joven, dependiendo de la rapidez con la que se haya acumulado la masa en el pasado", señala John Tobin, investigador del Observatorio National Radio en EEUU. Y es que el científico destaca la dificultad de establecer la antigüedad de estos sistemas. Según explica a ELMUNDO.es "hay protoestrellas en formación más jóvenes que L1527" que han sido observadas pero no han conseguido medir su masa. "Basándonos en la cantidad de material que hay en la nube que la rodea en comparación con la masa de la protoestrella, L1527 es la más joven de las que hemos logrado medir", añade.
Hasta ahora, el sistema más joven era el denominado L1551, con una edad comprendida entre los 500.000 y el millón de años.
Aún no se han formado los planetas
Tan jóvenes son la protoestrella y el disco protoplanetario presentados en 'Nature' que, según señala Tobin, "todavía no ha pasado el tiempo suficiente para que se formen los planetas"."La idea general que tenemos sobre la formación de planetas es que comienza con partículas minúsculas, microscópicas, que están en el disco que orbita la protoestrella. Estas partículas minúsculas chocan unas con otras, uniéndose. El proceso continúa hasta que el objeto va creciendo y finalmente alcanza el tamaño de un planeta. Este proceso tarda mucho tiempo en completarse, millones de años. De modo que parece que L1527 no lleva ahí el tiempo suficiente como para que este proceso haya tenido lugar", asegura el investigador.
Por lo que respecta al número de planetas que podría tener, el investigador afirma que cualquier cálculo "es pura especulación", pues el sistema es muy joven, aunque potencialmente podría tener varios planetas. El disco continuamente aumenta su masa a partir de la que hay a su alrededor, por lo que podría agrandarse con el paso de los años, de la misma forma que aumentará la masa de la protoestrella.
"Las observaciones previas de este sistema solar con infrarrojos habían mostrado que debía haber un gran disco. Esa fue nuestra motivación para observar la protoestrella con la máxima resolución disponible en un radiotelescopio", afirma. El disco de polvo que hay alrededor de la estrella emite ondas de radio de una manera muy intensa, lo que les facilitó poder calcular la masa de la protoestrella. Los científicos pudieron detectar tanto el polvo como el monóxido de carbono que rodean a la protoestrella.
Semejanzas con nuestro sistema solar
"En muchos aspectos, este sistema se parece mucho a cómo pensamos que debió ser nuestro sistema solar cuando era muy joven", explica Tobin."[En nuestro sistema solar] la formación de planetas probablemente empezó muy poco tiempo después de que comenzara a formarse el Sol. Probablemente ya se habían formado por completo 10 millones de años después del nacimiento del Sol, aunque la configuración final de los planetas tardó en completarse alrededor de 600 millones de años", explica el científico.
Los astrónomos seguirán investigando las características del joven sistema solar L1527 IRS utilizando el telescopio ALMA, en Chile.